De nuevo hemos escuchado el Aria de la Reina de la Noche... ¡nos encanta! y para representar el enfado hemos cogido una hoja de periódico. Mientras que las repartíamos hemos buscado algunas letras que conocemos, y algunos números... (se esconden por todas partes, pero no se nos escapan).
Luego hemos agitado con energía la hoja de periódico, la hemos arrugado, la hemos pisado, y la hemos rasgado, y hemos tirado los papeles hacia arriba con gran enfado.
Después, sin recoger nada, nos hemos sentado y hemos visto cómo ha quedado la clase.
¡Menudo desastre! A veces cuando nos enojamos y perdemos el control en nuestras rabietas, rompemos juguetes, cuentos, pegamos a los amigos, a los papás,... Y cuando volvemos a la calma, no nos damos cuenta, pero personas y objetos pueden quedar así de destrozadas. Hemos observado cómo el periódico que hemos roto, ya no lo podíamos arreglar.
¡Qué buen consejo, vamos a practicarlo nosotros también!
Por supuesto, la clase ha quedado perfectamente recogida, porque luego nos hemos convertido en los barrenderos del Parque y las hojas de periódico se han convertido en hojas de otoño y en un pis pas recogidas...
Y en el rincón de plástica hemos hecho estos terroríficos monstruitos... ¡No hay dos igual!
Una actividad muy buena y motivadora, Prado. Me quedo con la idea. La pondré en práctica en mi clase. Un beso.
ResponderEliminarYa te advierto que es catártica... después de tanta agitación nos quedamos todos relajadísimos. Y hasta ellos se sorprendieron de cómo quedó la clase de desordenada. Son muy pequeños, pero poco a poco quieron que aprendan a conocer sus emociones y a controlarlas. Un besote.
ResponderEliminarGracias Prado por acercarnos a su día a día y facilitarnos consejos. Uf!! esas rabietas...
ResponderEliminarAna Parras, como leí en una ocasión: ser padres es la única carrera que primero te dan el titulo y luego haces las prácticas... así que no nos viene mal de vez en cuando algún consejo...
ResponderEliminarMe alegro que el blog os sea útil en casa, Un beso.
Prado,, te cogeré prestadas estas fantásticas actividades son geniales.
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