El curso de Musicoterapia me encantó, fue eminentemente práctico por lo que los ejercicios los hacíamos nosotros, pudiendo sentir en nuestra piel la vergüenza inicial de tocar y ser tocados, y el placer cuando te dejas llevar. De este modo entiendes mejor las actitudes de los niños.
La parte de plantar la semilla y que crezca es de mi cosecha. Me gusta meterles en situación y dar un sentido a la actividad.
Y tú, ¿qué prefieres cuidar o que te cuiden?
Que buena idea
ResponderEliminarGenial Prado, me guardo la idea.
ResponderEliminarMe ha encantado! me la apunto, porque estas actividades son super importantes. Gracias! beset
ResponderEliminar