lunes, 13 de junio de 2016

MATEMÁTICAS CON AMOR... ¡¡RESTAMOS!!

Está comprobado que si el aprendizaje lo sazonamos con el componente emotivo siempre funciona mejor... Así que intentamos enamorarnos de las matemáticas. ¿Es posible?


Basándome en el juego del príncipe y la princesa que he visto en el grupo de Facebook sobre ABN, planteé el de los dinosaurios. Escribimos una resta en la pizarra y la leemos como "cuántos pasos tiene que dar el diplodocus para darle un beso a su amigo estegosaurio". De este modo aprendemos  que restar no es sólo "quitar".

Y si con dinosaurios funciona... ¡¡imaginaros cuando tenemos que saber los pasos que tengo que dar para abrazar a nuestro amigo... !! El premio es doble, resolver y abrazar.


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