Quien nos siga, sabrá que nuestra puerta no es que se abra, sino que permanece constantemente de par en par para las personas que nos aporten algo especial y que nos hagan vivir momentos únicos.
Como en otras ocasiones por Navidad, ofrezco a las familias la posibilidad de venir a clase a contar un cuento, realizar una manualidad, cantar un villancico, jugar con nosotros... lo dejamos abierto para que nos sorprendan, y creedme que lo hacen.
Este año Ana nos ha contado el cuento "Cuando a Matías le entraron ganas de hacer pis la noche de Reyes". Un cuento genial y muy gracioso con el que se sienten identificados, más cuando nos lo narran tan bien y hasta nos cantan una canción.
Después, junto a Eva y Maribel, nos propusieron realizar un adorno para el árbol de Navidad con "nuestras propias manos"... Eva nos explicó cómo lo íbamos a hacer y nosotros escuchamos con atención.
Y, luego, manos a la obra...
Molde de nuestras manos, recortamos...
..., pintamos caritas, ponemos ojos móviles,...
Y... ahí está.
Nuestro Papá Noel, listo para colgar en el árbol.
Y una foto de grupo para el recuerdo.
Por otra parte, María, nos ha deleitado con dos cuentos muy originales prestados por la Biblioteca.
Un cuento repetitivo sobre el burrito de Belén y otro "El cuento de los Reyes Magos (bien contado)" en los que María nos ha involucrado en la historia y nos ha hecho participar.
Los ha presentado en pps, para que lo viéramos a lo grande. Y, nuestras caritas lo dicen tooooodo.
Pero no sólo se puede participar asistiendo físicamente a la clase, hay familias que están entre nosotros sin estar.
Bruno ha compartido con nosotros este delicioso árbol de chuches. Según él lo ha hecho solo, pero sospechamos que su familia ha estado a su lado.
MIL GRACIAS A TODAS POR REGALARNOS VUESTRO TIEMPO Y POR HACERNOS VIVIR MOMENTOS TAN ESPECIALES.
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